martes, 14 de enero de 2014

Backpacker

Tenía programado un post depresivo para el día de hoy. Pero no, cambio de consorcio, cambio de planes.

Les voy a contar de mi juego favorito. Es el Backpacker. Se trata de un juego sueco de mediados de los 90. BMG tenía sus derechos de distribución acá. Lo conocí cuando tenía 7 años, nos lo había comprado mi viejo. Se trataba de un juego de preguntas y respuestas.

La premisa era la siguiente: eras un mochilero londinense que quería viajar por el mundo pero no tenía presupuesto. Ergo, tenías que ir trabajando de diferentes cosas en diferentes destinos para poder pagarte la estadía y el próximo vuelo a donde correspondiese. Tenías como 70 destinos en la primera edición del juego. No todos los países estaban contemplados, y a veces no necesariamente tenías la capital como ciudad de destino (ej: Brasil tenía a Río, Estados Unidos tenía como 5 destinos posibles y Suecia, en un guiño de los programadores, tenía a Gotemburgo además de Estocolmo).

Que recuerde: Londres, París, Madrid, Roma, Lisboa, Berlín, Amsterdam, Copenhague, Helsinki, Estocolmo, Gotenburgo, Oslo, Reyjkavik, Viena, Varsovia, Atenas en Europa. Estambul, Moscú, Teherán, Jerusalén, Kabul, Delhi, Hong Kong, Beijing, Tokio y Bangkok en Asia. Oceanía tenía a Melbourne, Sydney y Wellington.  Africa tenía a Casablanca, El Cairo, Lagos, Dar es Salaam, Luanda, Kinshasa y Ciudad del Cabo. América del Sur estaba representada por Lima, Santiago de Chile, Buenos Aires y Río. Luego al norte destinos como El Salvador, Guatemala, México DF, Hawaii, Los Angeles, Chicago, Nueva York , Florida, Vancouver y Toronto completaban el mapa.

Primero ibas al aeropuerto, elegías tu destino entre varios posibles, una animación unía los dos puntos del mapa, y cuando llegabas a destino con una música distintiva del lugar. Había una introducción breve sobre los datos del país (población, capital, moneda, exportaciones, historia y como se escriben las patentes de los coches).
Tenías un hotel, una agencia de empleos y una serie de fotos de la ciudad con información sobre la cultura del país.  Cuando llegabas al hotel, te hacían unas preguntas sobre el país. A veces lo que decían las fotos anteriores servía, a veces no. Y luego tenías un mapa del país donde tenías que identificar en 60 segundos 13 ciudades del país. En Argentina una de ellas era Comodoro Rivadavia (?)

Ejemplo: Hong Kong tenía esto de fondo


A raíz de tu desempeño en el cuestionario, la agencia de empleos te consideraba apto para ciertos trabajos y otros no. Si te iba mal, podías ser un paseador de perros, por ejemplo. Sí te iba bien, podías ser un astronauta si querías.  La oferta laboral era acorde a la ciudad. Por ejemplo, en Buenos Aires no ibas a poder ser astronauta, pero sí cuidador de caballos, portuario, o periodista deportivo. En Italia, por otra parte, podías ser historiador, mozo o arquitecto. Y nuevamente, una vez que elegías un trabajo, se hacían una serie de 10 preguntas pero esta vez sobre la profesión, y sí contestabas bien, te ganabas unos pesos. Por lo general luego había un minijuego. Podía ser desde estacionar un cohete como astronauta, distribuir pescados según su especie sí estabas en ese negocio, encontrar las diferencias en las fotos si eras detective, o una remake del juego de los 60 segundos, pero en vez de lugares del país podían ser 13 escenas de películas por ejemplo y debías identificar cual era cual. Si todo salía razonablemente bien, te daban algo así como una licencia en la profesión, producto de un mix de competencia y experiencia mínima.  Por otro lado, si te quedabas sin plata tenías que llamar a tu casa para pedirle un mangazo a tus viejos. Decías cuanto querías. Si era un monto razonable te prestaban. Si no, el juego se terminaba ahí.

Jamás voy a poder explicarles lo que eran las fotos de ese juego. Las colecciones más prestigiosas del mundo prestaron sus joyas de la corona (y sí, también podías ser fotógrafo en el juego, en su minijuego tenías que ir ajustando la luz, el foco y la apertura para que te quede divina la foto). Caballos saltando, auroras boreales, el cosmos, el Bolshoi, un puesto de frutas en Guatemala, el Lago Tanganika, el Monte Fuji, todo, todo. Todas los lugares dignos de fotografíar del mundo estaban ahí. Si las viera ahora probablemente lloraría. No sólo por su valor nostálgico, sino por lo lindas que eran.

A medida que pasaba el juego tenías un ícono de valija que se te iba desgastando y llenando de estampillas de todos los lugares donde habías estado.

Estaba todo el mundo al alcance de la mano.
Y podías ser arquitecto, astronauta, trabajador gráfico, inventor, enfermero, proyector de cine, detective, profesor de esquí, agricultor, constructor, químico o barman en cuestión de horas.  Así empecé a encariñarme con la física, o con la historia. Sabiendo que Morse había inventado el telégrafo en 1837 o que el curry no tenía pimienta negra ibas aprendiendo sobre el planeta y sus cosas. Y me volví alguien detestable para jugar al carrera de mente. De alguna forma, ese juego se convirtió en parte de mi personalidad.

Hoy cumplí 26 años y es momento de salir a chusmear un poco el globo.

en youtube sólo encontré esto, sobre el segundo juego. Para jugar, lamentablemente se rayó el CD (después de todo, eramos niños e irresponsables). En la época del download, lamentablemente sólo encontré el primero en sueco. Mal que mal se puede sobrevivir con esta distinción idiomática y es jugable.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario